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Arranca el PAT en Elche: buenas intenciones, poca concreción y rechazo al área metropolitana

2/02/2018 - 

ELCHE. Después de la polémica e inquietud tanto en formaciones políticas como con algunos agentes sociales por los inicios del Plan de Acción Territorial (PAT) y la posible disolución de Elche en un área metropolitana con Alicante, el jueves se mantuvo la segunda reunión —la primera fue en la Universidad de Alicante— en Elche. La Dirección General de Ordenación Territorial de la Generalitat Valenciana se reunió el jueves con agentes sociales de la ciudad, miembros del equipo de gobierno, y también de otros municipios a los que también incluye el PAT, como Aspe, Catral, San Vicente, Agost o la propia Alicante, de la que estuvo ausente su alcalde Gabriel Echávarri, así como algún concejal socialista local. Sí acudieron representantes de la UMH, Ineca, Avecal, Riegos de Levante, la Diputación de Alicante, representantes del ferrocarril, UGT y CCOO, entre otros.

Dos ciudades similares con participación equivalente

Precisamente, tras la casi unánime posición contraria al área metropolitana de la corporación municipal —salvo Compromís—, parece que las aguas bajan más relajadas ahora. La intención de la Generalitat, como señala Lluis Ferrando, director general de Urbansimo, es que haya un contacto constante con el territorio, tanto con los ayuntamientos como con los agentes sociales y económicos de cada municipio. Un objetivo que pretende que el PAT acabe siendo un plan funcional para el territorio, y no un plan dado desde Valencia. En cualquier caso, el alcalde Carlos González insistió en que no se denomine área metropolitana, sino áreas funcionales. Algo en lo que estuvieron de acuerdo otras plataformas cívicas presentes. 

Asimismo, el primer edil hace una valoración positiva de esta reunión, principalmente por esa predisposición del gobierno autonómico a que sean los distintos agentes de los municipios, quienes conocen el territorio, quienes establezcan las prioridades de cara a su futuro. “La voluntad del equipo redactor no es realizar un plan de autor, sino una coproducción de todos los agentes interesados”. González espera que este plan corrija desequilibrios y muestre “un camino de crecimiento sostenible a los municipios implicados”.

En ese sentido se expresa precisamente Ferrando, que se muestra satisfecho y espera que la administración esté a la altura de las necesidades para plasmarlas en un documento que optimice lo mejor posible el territorio, teniendo en cuenta la movilidad y el coste de oportunidad que buscan los inversores, así como la infraestructura verde o los parajes naturales. Indica la voluntad de empezar a “idear qué tiene que ser esta comarca en el futuro desde el minuto cero. La Generalitat, como administración supramunicipal de toda el área, no tiene más función que recoger las sugerencias y articular esas propuestas y plasmarla en un documento normativo que ayude a una planificación conjunta del territorio”.

A partir de ahora, llega el turno de crear mesas de participación y reuniones concretas en cada uno de los ayuntamientos, estudiar su realidad y mantener un contacto constante personal e involucrar a los agentes sociales y económicos a través de mesas sectoriales. De esta forma se irán generando documentos técnicos que irán revisándose en una comisión de seguimiento —participada por agentes sociales— hasta que en unos meses, en esta legislatura, se concrete un documento público, eso sí no definitivo, que ayude a los ayuntamiento en su planificación municipal.

Áreas funcionales y no metropolitana

Asimismo, según asistentes de los agentes sociales a la reunión, no se ha realizado ninguna propuesta concreta, “ha sido un compendio de buenas intenciones”, señalaban desde Àgora d’Elx, que también propusieron la posibilidad del tranvía hacia el sur por la deficiente comunicación que existe a su juicio: autovía saturada de tráfico y tren de cercanías ineficiente, algo en lo que se ha incidido en numerosas ocasiones. Además, también se planteó que se tuviera en cuenta el Palmeral en la estructura de Elche, ya que al parecer no se contempla en la documentación relativa al plan.

Otras propuestas que se hicieron giraron en torno a la conexión ferroviaria de Elche Parque Empresarial. También volvieron las quejas sobre la contratación a un equipo redactor de la UA y que no se contara con la UMH, y todos en contra del área metropolitana. Eso sí, también se dejó claro en las intervenciones que Elche no depende económicamente de Alicante ni viceversa. Como señalan desde CCOO, "un área metropolitana puede tener sentido en una ciudad como Valencia y ciudades dormitorio como Paterna, pero no entre Elche y Alicante". Señalan que sí podría ser otro asunto un área metropolitana de Elche, porque le influiría a Aspe, por ejemplo, pero en general, unanimidad: no áreas metropolitanas, mejor funcionales.

Desde Elche Piensa inciden en que "el PAT nunca saldrá adelante sin que se reconozca que nuestra provincia es policéntrica con dos ciudades destacadas y muy similares, que con Alicante y Elche". En cualquier caso, advierten que si el nombre es un problema para alguien de Alicante, la Generalitat debería plantear el PAT de forma independiente "tal y como ha hecho en Valencia y Castellón; dos PAT independientes pero que tienen en cuenta el espacio común entre las ciudades". Aun así, valoran positivamente que el alcalde de Elche y de otros municipios, así como partidos y otros agentes coincidan en estos planteamientos. 

Generalitat transmite calma con la polémica

Sobre la polémica del área metropolitana y si iría en detrimento de Elche frente a Alicante, cree que es un “debate del pasado, que son dos ciudades con población y capacidad económica similar, con influencia en municipios de alrededor: “es evidente que su participación tiene que ser similar”. Señala que los dos consistorios han mostrado su voluntad de participar y hay que quitarle importancia a dónde se reúne el equipo redactor y quién participa más o menos. Cree que finalmente este Plan Autonómico Territorial puede llegar a buen puerto frente a otros, porque no hay intereses económicos que condicionen el interés general, como defiende ocurría en el pasado. “Estudiar el desarrollo de forma técnica y a largo plazo, quita la arbitrariedad y la capacidad que otros gobiernos no estaban dispuestos a perder”.



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