Benidorm asume para este año el nuevo impuesto de residuos que sí repercute en la tasa de 2024

BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm va a usar sus ahorros de 2022 para pagar el incremento del precio de la recogida de residuos. Un aumento que el Consistorio atribuye a la aplicación de una nueva ley estatal. Se estima que para este 2023 el incremento llegue a los 837.000 euros, impuestos incluidos, y para costearlo aprobarán una modificación presupuestaria para destinar una partida a sufragarlo. Medida que evitó incrementar la tasa de la basura en periodo electoral. Esta decisión está lejos de la que se ha tomado para el 2024 cuando se ha subido un 71,82% para el recibo del año que viene.

A través de un comunicado, la concejal de Hacienda, Aida García Mayor, se ha referido a esta nueva ley aseverando lo siguiente: “Lo único que hace es obligarnos a pagar más por llevar la basura al vertedero de El Campello”. El anuncio de que va a sufragarlo con recursos propios se enmarca precisamente en los días previos a la celebración de la concentración en de los vecinos en protesta por la subida de la tasa de la basura y el IBI, que tendrá lugar el próximo 26 de noviembre frente al Ayuntamiento. 

En este clima, la edil del PP aprovechó para apuntar sobre el Gobierno central por la aprobación de la nueva ley que "el Gobierno de Pedro Sánchez se sacó de la manga el año pasado y que ha venido a encarecer la gestión de los residuos que pagamos todos los municipios y, por extensión, los vecinos”. En total, 837.316,49 euros más que el año anterior por el mismo transporte y tratamiento de residuos y que debe abonarse ya.

García Mayor ha explicado que la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados para una economía circular “no sólo se limita a crear un nuevo impuesto por rechazos de residuos a vertederos, sino que además establece que deben pagarlo las empresas que gestionan esos vertederos y después facturárselo a los municipios”. Esto “implica que además de pagar el importe del impuesto, los municipios tienen que pagar también un IVA, por lo que el atraco es aún mayor”. A su vez, aclaró que aunque la ley establece una moratoria de tres años para adecuar las tasas, ya se lo están cobrando a los ayuntamientos. 

La decisión del gobierno local de no repercutirlo en 2023 no se repetirá el año que viene, cuando la factura subirá en los hogares. El motivo de incrementar la tasa la han repetido los populares en las últimas semanas: además de la mencionada ley, se añade una autonómica aprobada en el anterior gobierno, unido a los incrementos del precio de la energía y carburantes.

Ciudadanía descontenta

A continuación, la edil dijo "entender" que la "ciudadanía esté descontenta con la subida de la tasa de la basura que aprobamos en el anterior pleno, en la que por cierto ya se contemplan gastos como el de este nuevo impuesto estatal, pero el Ayuntamiento no puede seguir haciendo frente a estos incrementos con sus recursos propios como sí ha hecho en 2022 y 2023”.

Así, García Mayor ha recordado que "en estos dos años el Ayuntamiento ha pagado más de 3 millones de euros para que no tuviera que hacerlo la ciudadanía ni el tejido productivo", pero asegura que el "colchón municipal no es infinito".

Sobre la modificación presupuestaria para pagar los cerca de 840.000 euros, la edil ha anticipado que el gobierno local la llevará a pleno el lunes. Una vez se liquide el importe del impuesto, “esperemos que el Gobierno de España también cumpla con su parte y notifique a los Ayuntamientos que nos van a llegar fondos para la compra de contenedores, camiones y otros recursos que mejoren el servicio, porque este impuesto es finalista a pesar de que el año pasado no llegara ni un céntimo para mejoras”.