ALICANTE. El HLA Alicante derrotó el lunes a la historia. La que recordaba otros encuentros, aún en la retina de los aficionados, y que dejaba malos augurios en el ambiente de la previa del partido. Nada más y nada menos que 355 días atrás de la disputa del Lucentum-Navarra, quinto partido de la serie de cuartos de final del 'play-off', los alicantinos caían ante Valladolid en otro quinto partido. Con el guión más cruel de la historia, con Álex Reyes errando una bandeja que sería noticia nacional. Todos hablan del fallo, nadie comenta que el cacereño jugó gran parte del partido con el tobillo maltrecho, cuajando una gran actuación.
Así es el deporte, capaz de preparar el devenir más ruin y de alzarte al Olimpo, o al menos acercarse. Lucentum dio un paso de gigante al superar al conjunto Foral por 86-61, en un partido de clara superioridad local, donde los de la terreta alcanzaron rentas de más de treinta puntos durante algunos momentos del tercer cuarto. Una victoria coral, donde todo el equipo estuvo presente, teniendo como muestra los 12 minutos en cancha de Zach Grossenbacher, el menos empleado por Varela, sin contar la presencia de los canteranos Jaime Llano y Pablo Matarredona.
El técnico madrileño optó por rotar a sus hombres. Sin ir más lejos, Pedro Rivero solo estuvo 17 minutos en cancha, Álvaro Lobo no superó los 21 minutos, y el jugador más empleado fue Kingseley Sam, que disputó 25 minutos. Curiosamente el jugador que falló los dos tiros libres en Navarra, que forzaron el quinto partido. Fue en el norte peninsular donde se fraguó el todo o nada del martes, con dos partidos ganados por el conjunto de David Mangas, y el lance del domingo finalizado con sorprendente victoria final para el conjunto navarrico.
Los partidos en Alicante fueron otra historia. El duelo inaugural dejaba un partido igualado, salvo por el último cuarto, donde las fuerzas de los pamplonicas bajaron, asestando el golpe definitivo del partido el conjunto de Varela en el definitivo. El segundo choque de la fase supuso la desigualdad hecha encuentro de baloncesto, con un guión muy parecido al del último partido. Los pabellones han dictado sentencia en esta serie de cuartos de final, y el Ferrándiz ha acabado por imponerse con un gran ambiente, como el de las grandes ocasiones.
La primera ronda de 'play-offs' ha dejado sorpresas, como la de La Roda, que fue apeado por Real Canoe por 0-3. Los manchegos llegaban con factor cancha, como segundo clasificado, siendo el equipo revelación de la temporada, y el que peleó ante Granada por la primera posición hasta el último momento. Diferentes problemas en el equipo rodense dieron el pase a los madrileños, con Albacete superando a Hospitalet en otra de las series, dejando al conjunto de la capital de la provincia como único representante de la región.
Lucentum se medirá a Óbila Baloncesto, que superó a Morón por un contundente 3-0. Los abulenses no tienen buen recuerdo de sus visitas a Alicante, con cuatro derrotas en temporada regular en todas sus visitas al Pedro Ferrándiz. La más dolorosa la del año 2015-2016, con un tanteador de 100-61 favorable a los de Kuko Cruza, todavía entrenador lucentino en aquella temporada. El duelo de este curso ha sido el más igualado de la serie, con un 62-57 favorable a los alicantinos. Jon Ander Aramburu, exlucentino, lidera a los de Ávila, con Kyle Hittle y Harol Cazorla como principales amenazas ofensivas.
