los visados caen en agosto y septiembre

La obra nueva se 'relaja' porque los promotores echan mano de recursos propios

2/12/2016 - 

ALICANTE. El ritmo de inicio de obras nuevas en la provincia de Alicante se relaja. Tras crecer a un ritmo de más del 40% durante los dos primeros tercios del año, la concesión de visados para iniciar nuevas promociones o rehabilitar las existentes ha comenzado a decaer tras el verano. Tanto en agosto como en septiembre se concedieron en Alicante menos visados que en los mismos meses del año anterior, mientras en España la tendencia era justo la opuesta.

Así, en agosto se expidieron en la provincia 284 visados, cuando el mismo mes del año pasado fueron 392 (un 27,5% menos). En septiembre se repitió la tendencia: 466 visados este año por los 547 de 2015 (una caída del 15%). Con todo, en el acumulado del año el sector de la construcción sigue ofreciendo mejores perspectivas que el pasado: 4.997 visados entre enero y septiembre, frente a los 3.937 visados del mismo periodo del año pasado. Es decir, el inicio de obra nueva en la provincia sigue creciendo, pero menos: concretamente, un 26,9% (cuando hasta julio el incremento era del 43,6%.

¿Se trata de un cambio de tendencia? ¿Se ha agotado la recuperación del ladrillo en la provincia? El coordinador de análisis de Ineca, Francisco Llopis, advierte de que es prematuro sacar conclusiones, porque la caída de los visados se ha producido en un periodo muy corto, y destaca que hasta julio se estaba creciendo a buen ritmo. El analista del Instituto de Estudios Económicos de Alicante apunta una posible explicación: Alicante mantiene la línea ascendente de inicio de obras pero se ha 'relajado' porque fue la provincia que con más fuerza se enganchó al despertar del ladrillo en 2013. "Desde que comenzó la recuperación en el sector, Alicante iba muy adelantada al resto de España (fundamentalmente por las compraventas de viviendas a extranjeros en la costa), y ahora esa diferencia se está nivelando".

Pero no es solo que el sector en Alicante le llevase mucha ventaja al del resto del país. Según explica Llopis, y corroboran fuentes del sector consultadas por Alicante Plaza, los promotores alicantinos están llevando a cabo las nuevas construcciones, en muchos casos, con recursos propios. Esto es, en lugar de recurrir a financiación bancaria, comienzan la obra con sus propios fondos y el adelanto que realizan los compradores. En el caso de los extranjeros, además, están dispuestos a aportar como entrada una cantidad considerable, pese a comprar sobre plano, lo que facilita la puesta en marcha de la obra.

Evidentemente, al construir sin financiación, la mayoría de constructores opta por levantar una sola promoción de una vez y venderla antes de empezar la siguiente. Una fórmula que, además, permite adecuar la producción a la demanda. "Se está dosificando el esfuerzo", argumenta Llopis. "Al trabajar con recursos propios y sin financiación, no se abarcan tantas operaciones a la vez como antes". Eso no impide que algunas grandes promociones en marcha, como la del residencial Airen (que promueve Edificia y construye Ecisa) o el de Parque Mariola (de una filial de Alicante Urbana con CHM), ambas en la playa de San Juan, sí cuenten con financiación.

En cualquier caso, la comparativa de los últimos cuatro años sí muestra un cambio de tendencia notable. La concesión de visados de obra nueva tocó fondo en 2012, con solo 2.300 concedidos. En 2013 se experimentó un pequeño repunte hasta los 3.158 visados, que se mantuvo un año después con otro incremento hasta los 3.367. El auténtico despegue del sector vino en 2015, cuando se rebasaron los 5.200 visados (muy lejos aún de las cifras previas al estallido de la burbuja, eso sí). Una cifra que está a punto de alcanzarse a falta de tres meses para terminar el año, pese a 'relajarse' el ritmo.

Noticias relacionadas

next
x